Padecerlo genera un círculo vicioso donde el empleado ya no sabe ni cómo salir y mucho menos cómo se originó para poder corregirlo.
Constantemente en reuniones, en la oficina, con mis clientes, amigos y proveedores, observo fuertes bostezos y escucho quejas con respecto al cansancio que la gente dice sentir día con día. Y yo me pregunto, ¿es normal sentirse tan cansado? ¡Yo creo que no! Y por tal motivo comencé a investigar de dónde y cómo es que nos enfermamos en el ambiente Godín y, mejor aún, cómo remediarlo y prevenirlo para no afectar nuestro rendimiento laboral y personal.
Me di a la tarea de hacerlo de una manera más alternativa y no desde el punto de vista de la medicina convencional y me entrevisté con el Dr. Sergio Hernández Gutiérrez, director y fundador del Centro de Nutrición y Medicina Funcional (CNMF) en México, quien, de entrada y de acuerdo a lo que me comentó es lo que tiene percibido y constatado con sus pacientes desde este campo de la medicina funcional al cual él se dedica, asegura que las causas principales de las enfermedades Godín son:
– Mala higiene del sueño (20% de las personas tiene alteraciones del sueño y ¡sólo 1 de cada 10 atiende esta problemática!).
– Sedentarismo (que el doctor lo define como la “falta de actividad física moderada durante 30 minutos 3 veces a la semana”) del 55% de las personas.
– Estrés laboral elevado en el 95% de sus casos y pésimos hábitos alimenticios en 8 de cada 10 pacientes, no importando la nacionalidad o procedencia.
Las repercusiones de estas enfermedades Godín (que es como yo le llamo a estas enfermedades que padecemos los que estamos en el campo corporativo diariamente) son: baja energía durante el día, baja productividad laboral, mala atención y alteraciones en procesos cognitivos (como pensar en ideas y generar creatividad que es de las cosas que más afecta), mayor número de enfermedades por la baja de defensas (sistema inmunológico) y, como consecuencia de todo lo anterior, un alto índice de ausentismo en el trabajo, independientemente del giro en el que se labore. Todo lo anterior, genera un círculo vicioso donde el empleado ya no sabe ni cómo salir y mucho menos cómo se originó para poder corregirlo.
Aquí es donde la Medicina Funcional entra en acción ya que esta nueva corriente, de la cual el doctor Hernández Gutiérrez es pionero en México, se enfoca en la raíz de los problemas y en desterrar los malos hábitos que originan a los mismos y no solo atiende o “resuelve” con medicamentos (que normalmente son paliativos) las enfermedades que se generan y las complicaciones que se van teniendo en el camino.
Este enfoque funcional, explica el doctor, se da analizando al paciente desde 7 sistemas fundamentales: gastrointestinal, inmunológico, energético, detoxificador, comunicación (hormonas), transporte y, desde luego, el enfoque emocionalmental-espiritual, cuando normalmente a lo que estamos acostumbrados es que solo se atienda el problema, nos den un analgésico, antiinflamatorio, antihistamínico y ¡listo! ¿Quién sigue en la fila?
Por: Javier Vázquez Gómez
Director General de Tok Relaciones Públicas.
