El sector turismo ha crecido notablemente en los últimos años, ya sea por la iniciativa privada o por instituciones encargadas de potencializarlo, además del notorio incremento en los destinos que deriva en una fuente de crecimiento económico.
Consultoría platicó con Adriana Pérez Quesnel, Directora General del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) quien nos habla de los retos, proyectos y trabajos de la dependencia.
Oportunidades de inversión
La titular de Fonatur destaca los Centros Integralmente Planeados (CIP), ubicados en Cancún, Huatulco, Ixtapan, Loreto y Litibú: “Las nuevas oportunidades de inversión que estamos generando son en lugares muy bonitos, dinámicos y de acorde con las circunstancias de estos días; uno de ellos es Marina Cozumel, un fraccionamiento en el que estamos comercializando la primera parte.”
“Ya tenemos toda la infraestructura de las calles y demás, la parte continental de toda la tierra ya está construida y urbanizada, estamos trabajando en la parte de la marina. Llevamos en tierra 90% de avance y en la marina 10%; debe estar listo en noviembre de este año todo el desarrollo”, señala la funcionaria.
Adquirir un predio en los CIPs ofrece varias ventajas que van desde la certeza jurídica que otorga una instancia federal hasta la infraestructura proporcionada por Fonatur que incluye: agua, drenaje, reparaciones, alumbrado, limpieza. Igualmente, a quienes adquieren un lote se les otorga crédito, pagan 10% de enganche y el resto a ocho años, con una Tasa de Interés Interbancaria de Equilibrio TIIE, más dos puntos.
El primero de estos Centros fue nada menos que Cancún y a pesar del paso del tiempo no ha sido abandonado, ese es el compromiso: “En mantenimiento invertimos este año 320 millones de pesos en todos nuestros CIPs. Por otra parte, mil 961 millones de pesos fue la inversión en infraestructura de Huatulco, en el periodo 2007-2011, me refiero a obras de cabeza, calles, plantas de tratamiento”.
En Nayarit existe otro proyecto en desarrollo: El Capomo localizado a 100 kilómetros al norte de Punta Mita de Litibú, tendrá un campo del golf, lotes comerciales y residenciales en una superficie de 255 hectáreas.
La funcionaria también divisa oportunidades en el CIP de Teacapan, Sinaloa con 2 mil 351 hectáreas: “Es un mega desarrollo. Tenemos contemplado una densidad de 44 mil cuartos aproximadamente y ya concluimos todo el plan maestro”.
A noviembre de 2010, tan sólo en el CIP sinaloense, ya se había ejercido una inversión por 382.2 millones de pesos en obras de urbanización, estudios y proyectos.
Una de las razones por la cual se eligió ese punto geográfico fue la disponibilidad de tierras, explica la titular de Fonatur: “Es la primera vez que Fonatur compra los terrenos (antes se expropiaban), nos encargamos de la urbanización, ponemos todos los servicios a pie de lote, plantas de tratamiento, campos de golf y demás. Las proyecciones financieras que tenemos es que sí es rentable para nosotros, porque al poner nuestro sello los espacios tienen mucho más valor y se pueden vender mejor, de modo que la inversión se recupera”, afirma.
Destino fértil para consultores
¿De cuánto será la inversión en el CIP de Sinaloa?
Tenemos planeado invertir 3 mil doscientos millones de pesos de aquí al 2019. De hecho Sinaloa es el primer proyecto con presupuesto multianual que se tiene en la administración pública federal respecto al turismo, esto quiere decir que los recursos están garantizados de aquí al 2019 para hacer toda la infraestructura que se necesita.
El turismo frente a la inseguridad
Desafortunadamente, la inseguridad es un factor que empieza a tener repercusiones en el rubro, al respecto nuestra entrevistada afirma: “Nosotros estamos contrarrestando este efecto, nos ayuda el mensaje boca a boca. Durante este año no tuvimos ningún incidente con springbreakers, por ejemplo. Lo que hemos hecho son muchas campañas de promoción de ‘conoce México, vive México, experimenta México’. Sí, hay lugares que son mucho más seguros inclusive que Suiza y no estoy exagerando, al revisar las estadísticas internacionales encontramos, por ejemplo, que Mérida es más tranquila que el país europeo”.
“Tenemos una gran labor, que es evitar esta imagen y explicar que México es un país gigantesco, entonces lo que pasa en Tijuana, en la frontera, no sucede en Cancún, ni en Campeche, ni en Oaxaca. En eso estamos trabajando”, complementa.
“Con el desarrollo de Sinaloa, que ahora es una zona vulnerable, tenemos una gran ventaja y es que básicamente nuestros desarrollos son a mediano y largo plazo; entonces los inversionistas, que es un grupo amplio y conocedor de Fonatur, han invertido en cada uno de nuestros CIPs y afortunadamente ya están esperando el nuevo destino”.
Pasando a temas más afables, a la lista de oportunidades se añaden los gobiernos locales, la funcionaria menciona: “Los consultores también se necesitan para los niveles estatal y municipal, porque desafortunadamente los municipios no tienen tantos elementos para saber qué hacer, creo que allí hay un gran mercado”.
En ese rubro entra el programa Pueblos Mágicos apoyado por la institución donde, entre otras cosas, se transforman haciendas en hoteles: “Se le pide a la gente que traiga su idea, su proyecto o su sueño y Fonatur le ayuda a materializarlo. Una vez que aprobamos el proyecto, Financiera Rural, la Comisión de Pueblos Indígenas y en este caso las Haciendas de México le destinan recursos. No somos banca de desarrollo, pero sí podemos coadyuvar con el inversionista a buscar las fuentes de financiamiento que se necesiten”.
De la mano de los consultores
Fonatur cuenta con una dirección encargada de apoyar y asesorar a los estados, es decir, por petición de la entidad verifica técnicamente si es viable un desarrollo turístico; para ello cuentan con un presupuesto, para este año de 30 millones de pesos, en el cual están contemplados los consultores para trabajo de campo y estudios ambientales.
¿Tienen costo las asesorías de Fonatur?
A los municipios no; hacia los privados sí tiene un costo de el 10% del valor del proyecto, a pagar en partes y les damos la marca Fonatur, eso es lo importante, no sólo la asesoría sino el respaldo.
“Otro programa muy importante es la Certificación de Proyectos, llevamos la figura de Fonatur hasta el privado, pero para lograrlo ellos deben certificarse, llenar una serie de documentos, hacer una serie de acciones y una vez que están hechas, nosotros ponemos el sello de Fonatur, con esto logramos que el proyecto tenga más credibilidad y acercarlo a más posibles clientes”.
Sobre la consultaría, Pérez Quesnel señala: “Hemos encontrado los consultores que requerimos, pero observamos que hay una gran oportunidad; con los que trabajamos es un grupo muy bueno y especializado, pero son pocos”.
Refiere los requisitos básicos para trabajar como consultor para Fonatur: “Es indispensable que tenga experiencia en lo que vamos a hacer, que sea una empresa formada o una persona física con todos los documentos en regla”.
En las últimas décadas el sector no se ha mantenido inerte: “Ha cambiado muchísimo, por la aportación, obviamente, de la iniciativa privada y también del Fonatur. Hemos desarrollado nuevos mecanismos para proteger la ecología. Cada vez somos más ecológicos, hacemos Centros Integralmente Planeados mucho más sustentables, porque estamos convencidos de que los turistas cada vez buscan más eso”.
“Hemos invertido lo doble que en el sexenio anterior y mucho más que en los otros sexenios. Hablamos de mil 740 millones de dólares en pura infraestructura y la pasada administración se invirtieron aproximadamente 560 millones de dólares”, señala.
La visión del consultor
Desde la óptica de un consultor, Alejandro Guzmán, Director Operativo de A+L Consultoría en planeación turística, afirma: “Es un ramo muy especializado que es difícil y hay que conocerlo bien”.
¿Cuál es el principal reto para los consultores en el sector turístico?
La velocidad de cambio en los patrones del comportamiento turístico debido a la alta especialización que se está dando. Cada vez hay segmentos más específicos, sofisticados y especializados, por lo que se abre una gama muy grande de ramas donde se tiene que trabajar y estar actualizado.
Sobre los Centros Integralmente Planeados opina: “Están diseñados para recibir toda clase de turismo y en los que se ofrecen áreas adecuadas a todo tipo de demanda. Tienen la capacidad de dar cabida a los proyectos de cualquier tipo de especialización.”
¿Le estamos dando la importancia debida al turismo?
Hay gran preocupación especialmente por parte de Fonatur. Precisamente acabamos de terminar un estudio sobre las nuevas corrientes de turismo y los productos que se están dando en niveles muy especializados como son los hoteles de categorías superiores a 5 estrellas, campos de golf de campeonato y marinas turísticas.
El especialista reconoce que el problema de la inseguridad afecta al sector: “Han bajado los niveles de afluencia por este tipo de problemas, se está contrayendo incluso el turismo interno”.
¿Cómo puede el sector contrarrestar la reducción del turismo como efecto de la inseguridad?
Con campañas publicitarias en las cuales se demuestre que, en la mayoría de los destinos turísticos, no es tan grave la situación como muchas veces se exagera en los medios. No hay ningún país que sea totalmente seguro; sin embargo, hay muchos países que tienen más problemas de inseguridad que nosotros, pero no los publicitan. Entonces tendría que hacerse una campaña de mejoramiento de la imagen del turismo en todo el país y sobretodo en el extranjero, por ahora no la hay de forma institucional, integral y permanente.
La profesionalización de quienes intervienen en los servicios turísticos es otro reto que destaca Alejandro Guzmán: “La atención que se le debe dar al turismo no siempre es la adecuada. Hay mucha gente improvisada, sobre todo porque los profesionales requieren niveles de ingreso que no siempre están dispuestos a pagar los empleadores. El otro problema es la movilidad tan grande de personal por lo que hay una rotación muy alta y muy poco personal realmente calificado”.
Al referirnos al nicho para consultores, acota: “Cada vez hay más personas entrando al sector. Entonces la competencia es cada vez mayor en el área; sin embargo es poca la gente altamente especializada y son pocas las empresas ya consolidadas. Es difícil para las nuevas empresas entrar, sobre todo por la especialización que se está dando en el turismo”.
Con 40 años como consultor, Alejandro Guzmán recomienda a aquellos especialistas que estén interesados en el sector a que prevean las cambiantes necesidades del turismo y que tengan una cuidadosa planeación del sector, en la que se anticipen a las distintas modalidades que se están dando en la actividad, pues los turistas potenciales son cada vez más exigentes, rigurosos y selectivos.