Los gobiernos de algunos países en asociación con empresas han desarrollado aplicaciones de seguimiento de contactos como una herramienta más para contener la epidemia y utilizan tecnologías de teléfonos inteligentes para determinar si los usuarios han estado en contacto con una persona infectada.
Pero los cibercriminales han encontrado una nueva forma para robar datos de algunos usuarios. Desde el comienzo de la crisis del coronavirus, se incrementaron las amenazas informáticas que tratan de aprovecharse de la vulnerabilidad de las personas que buscan información y soluciones.
Y están circulando en el mundo muchas aplicaciones falsas diseñadas para parecerse a las herramientas oficiales de lucha contra la pandemia, para propagar virus informáticos y robar datos de usuarios. Una vez instaladas en los teléfonos inteligentes, estas aplicaciones descargan e instalan un malware para robar identificadores y datos personales. No parecen distribuirse a través de los canales formales, como las tiendas de aplicaciones de Google o Apple, sino que se propagan a través de enlaces en otras aplicaciones o sitios web.
Por: María Vallejo
Reportera