La innovación y el crecimiento es el foco que más empresas están adoptando. Cambios en las estructuras, liderazgos y formas de dirigir a las que estábamos acostumbrados, han dado un pasa a mejorar gestión de talento que ayuda a formar equipos que lleven a las organizaciones a lograr objetivos tanto de negocio como de impacto positivo.
A pesar de que se han logrado avances reales, aún hay que trabajar contra el “techo de cristal”, el cual alude a las barreras invisibles que encuentran las mujeres al abrirse paso en su carrera profesional, que por décadas limitó no sólo el desarrollo laboral del 50% de la población mundial, también afectó a las propias empresas al eliminar la posibilidad de nutrir la diversidad de puntos de vista y la complementariedad de opiniones, que se traducen en una toma de decisiones mejor informada.
Sin duda, estamos ante una oportunidad de dejar atrás las brechas de género en la cultura laboral, apoyar las iniciativas para acercar a las niñas y adolescentes a las ciencias, matemáticas y tecnología; impulsar el liderazgo de las mujeres.
Ahora más que nunca, las empresas deben tomar medidas y acciones a favor de una mejor gestión de recursos humanos, para que ningún techo de cristal afecte a su talento.
Por: Maria Vallejo Vera
Reportera