La resiliencia significa más que continuidad, es responder a los cambios.
Diferentes industrias productivas realizan procesos que permiten mejorar su capacidad operativa. Temas vitales como la Continuidad de Negocio y Gestión de riesgo, toman hoy vital importancia dada la globalización en que vivimos.
“Las Normas de Sistemas de Gestión y sus evaluaciones buscan reducir los riesgos de la cadena de suministro y mejoran la Resiliencia general de las organizaciones”, afirma Ganesh Natarajan, director de Prestación de Servicios para el Sector Automotriz de BSI Group.
En la actualidad, los estándares son globales y todos comparten la misma filosofía y características enfocadas en el riesgo. Por ejemplo, el sector automotriz es uno de los más representativos al ser la puerta de entrada a otros temas como: Movilidad, Seguridad, Tecnología, Salud y Medio ambiente.
Asimismo, la cadena de suministro, constituida por proveedores, fabricantes, distribuidores, puntos de venta, clientes y consumidores, requiere del cumplimiento estandarizado de las Normas más actuales, con la ventaja de que son complementarias entre sí, ya que se funden en una filosofía holística. Es decir, en los estándares existe una visión de conjunto para cualquier organización y sus procesos, a tal grado que son un aliado estratégico en cualquiera de las etapas de desarrollo de las organizaciones, incluyendo dichas cadenas de suministro y partes interesadas.
No importa que sea en Europa o en Latinoamérica, se trata de apoyar al mercado en LA soportados en la experiencia de un siglo y en las normas y certificaciones vigentes, focalizándonos en la Prevención del Riesgo y el valor de la Resiliencia; exigencias permanentes de cumplimiento para cualquier organización.
Es decir, un pequeño error en la producción puede reportar costos de billones de dólares en daños y gastos legales, haciendo sumamente necesario que la cadena de suministro se encuentre en todo momento y en cada etapa, bajo altos estándares de calidad globales.
La industria automotriz, el punto de quiebre
Desde 2014 hasta la fecha, los fabricantes de la industria automotriz han retirado más de 60 millones de vehículos en Estados Unidos y decenas de millones en todo el mundo, como se reportó en diversos medios de comunicación internacionales.
“En el pasado cada empresa automotriz hacía sus auditorías con los negocios involucrados en la cadena de suministro, lo cual llevaba mucho tiempo y dificultaba la visita a cada una; incluso, la industria automotriz fue de las que más tardó en adoptar la Norma ISO 9000 en los años noventa”. Así lo comenta Tim Green, de la Firma Certificadora Group.
Al respecto, se procuró solventar la problemática con el estándar IATF (International Automotive Task Force) que valida toda la industria y reduce aquellos inconvenientes. Sin embargo, el reto implica una actualización que podría demorar hasta dos décadas. Se trata de estar seguros de que la cadena de suministro estará protegida y sea lo suficientemente resiliente para asegurar la continuidad a lo largo del tiempo.
El tema del cumplimiento en cualquier organización y la garantía de supervivencia, requiere de una total adopción de los estándares internacionales aplicables, con una alta dosis de resiliencia. Reconocer que el trabajo se debe realizar en colaboración con las partes interesadas y comités para lograr resultados positivos en este sentido.
El no cumplimiento en procedimientos y protocolos de seguridad en determinados servicios, suelen implicar errores relacionados con el aspecto humano. Cumplir con las normas y regulaciones evita el colapso que podría llevar a la quiebra de un negocio o empresa.
Fuente: BSI Group
Por: Beatriz Canales
Directora Editorial