El 2021 será un año en el que las empresas mexicanas tendrán que replantear sus modelos de negocio, reestructurar proyecciones financieras y reconstruir su participación en el mercado para aspirar a recuperarse económicamente en medio de un escenario adverso e incierto.
Impulsar el talento bajo nuevos métodos de trabajo es la prioridad reconocida por 29% de los participantes en la encuesta realizada por AMEDIRH en diciembre 2020. “La respuesta obedece mayormente a la transformación digital emprendida recientemente por muchas empresas. Además, el 25% identificó como prioridad la salud y el bienestar de la fuerza de trabajo, lo que refleja el valioso aprendizaje dejado por la pandemia”.
El estudio revela que acciones como el rediseño de los planes del negocio (17%) y la salud financiera (16%) ocupan el tercer y cuarto lugar, respectivamente entre las prioridades de los líderes. Por último, aunque se pronostica que 2021 sea un año de reconstrucción, la recuperación del mercado fue reconocida como un requerimiento fundamental por apenas 14% de los participantes.
Trío de competencias
En cuanto al desarrollo de competencias entre los líderes y los equipos de trabajo, agilidad, flexibilidad y adaptabilidad mayoritariamente señaladas como necesarias para que los líderes lleven a cabo la gestión del talento con 42% de relevancia.
Entre otras habilidades, la innovación de mercado y el desarrollo de nuevos negocios fueron elegidas por 16% de los participantes en la encuesta, mientras que la anticipación, planeación y evaluación a corto plazo alcanzó 14%.
Los líderes tienen frente a sí un reto de enormes proporciones que requiere el dominio de todas las competencias mencionadas, pero lo viable es realizar un cuidadoso análisis de aquellas que su organización requiere con más urgencia para orientar hacia ellas su atención prioritaria.
Como parte de la encuesta, se incluyó un reactivo en el que se preguntó por el rumbo que tomará la gestión laboral en 2021. Al respecto, los líderes de RH participantes expresaron que primero hay una orientación a introducir las jornadas compartidas (39%), mientras que la implementación de jornadas reducidas fue elegida por el 12%. Segundo, se identificaron los contratos por proyecto u obra determinada (25%).
Las negociaciones con los sindicatos también están en el horizonte inmediato: primero en torno a la revisión salarial y de prestaciones (19%) y luego por la negociación de modelos de salud (5%).
Tratándose de balance entre la vida laboral y la vida personal estando en casa, el tema fue valorado como el mayor reto para el desarrollo del talento por el 27% de los respondientes, lo que deja ver que los líderes están conscientes del impacto que tiene en sus equipos el haber llevado el trabajo a sus hogares.
Otros retos identificados por los participantes en la encuesta fueron, en segundo y tercer término, respectivamente, el mantener el sentido de pertenencia y el compromiso de la gente (25%), así como la conectividad y la tecnología para el trabajo (20%). En ambos casos, se trata de desafíos puestos en relieve por el teletrabajo.
Al responder sobre el principal reto para Recursos Humanos, los socios participantes se inclinaron por fortalecer la comunicación, el clima y la cultura laboral (44%), seguido por rediseñar la organización de acuerdo con las nuevas demandas (36%). Por otro lado, con 10% de las respuestas se ubicaron mapear los riesgos de salud y productividad del negocio, así como innovar en desarrollo organizacional.
“Dado que 2020 marcaba un cambio de década, era de esperar que la innovación sería su característica más notable”. No obstante, nunca anticipamos los formidables retos que obligarían a transformar de súbito los más diversos aspectos de la vida diaria y organizacional”, explica Mauricio Reynoso, Director General de la Asociación Mexicana en Dirección de Recursos Humanos (AMEDIRH).
Por: Beatriz Canales
Directora Editorial