Los recientes conflictos en materia fiscal entre Estados Unidos y China han ido más allá de un ámbito académico repercutiendo en la separación de Google y Huawei (empresas de dichos países respectivamente). Para entender un poco más de esto debemos tener en claro el inicio del conflicto y la repercusión.
La relación comercial entre estas dos potencias mundiales se ha desgastado, esto debido a que datos de EU demuestran que hay un déficit muy grande entre los productos que ambos importan y exportan entre ellos. La siguiente grafica muestra cifras en millones de dólares:
Es a partir de estos datos que el presidente Donald Trump decidió firmar un memorando el 22 de marzo de 2018 bajo el artículo 301 de la Ley de Comercio de 1974, ordenando al Representante Comercial de Estados unidos (USTR por sus siglas en ingles) que se apliquen aranceles (impuestos a los bienes de importación) de 50 000 millones de dólares a los productos chinos.
La cantidad de productos afectados en este conflicto ha hecho que China cancele importación de distintos bienes, uno de ellos la Soya. Por otro lado, a pesar de que el subsecretario de Asuntos Internacionales del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, David Malpass, y el viceministro de Comercio de China Wang Shouwen se reunieron el 22 de agosto en Washington DC, en un intento por reiniciar las negociaciones, el tema quedó sin resolverse.
De esta manera, el régimen asiático actuó en respuesta a esta disposición aumentando sus propios aranceles en un equivalente igualitario al aumento americano en un total de 128 productos estadounidenses, esta guerra ha ido evolucionando desde el año anterior hasta la actualidad de la siguiente manera:
Es notorio que estamos ante un conflicto que ha desbalanceado el mercado mundial por tener a las dos grandes potencias involucradas, también es posible vislumbrar que la resolución está muy lejos de concretarse, lo que probablemente cause algunos otros conflictos entre empresas de ambas naciones.
Aunque Huawei está siendo una de las líderes en innovación tecnológica en los últimos años, desarrollando por ejemplo la red 5G, al gobierno estadounidense le preocupa bastante el espionaje electrónico por parte de la empresa, por lo que pidió a Google separarse de su aliado, afectando directamente a los miles de consumidores en el país y en otros países de este producto.
Los productos de la marca asiática que ya se encuentren en manos del público seguirán funcionando, sin embargo, dejaran de recibir actualizaciones del sistema operativo. Por otro lado, Huawei está trabajando ya en un posible reemplazo del sistema operativo Android, anunciando que tienen listo el sistema HongMeng para introducirlos a todos sus productos.
Por: Fernando Becerril
Reportero