Los elevados niveles de informalidad que prevalecen en México limitan la posibilidad de que lleguen los mecanismos de apoyo desplegados por la banca a los hogares y micronegocios, advirtió el vicepresidente del Banco Mundial para América Latina, Carlos Felipe Jaramillo. Información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) evidencia que dos de cada tres negocios que operan en México son informales, es decir que no pagan contribuciones patronales, ni tienen registrados a sus empleados ante el seguro social, no pagan servicios contables, legales ni de administración.
El funcionario del Banco Mundial comentó que el organismo internacional extendió una serie de garantías a las microempresas de México y otros 10 países durante la pandemia del Covid-19. Pero el bajo nivel de bancarización que tienen las Pymes mexicanas y el hecho de que muchas de ellas están operando en la informalidad, limitó el potencial de este instrumento. Estadísticas contenidas en el Global Findex 2018 del Banco Mundial, muestran que la penetración de la banca en México cubre 36.9% de la población total, una proporción que contrasta con 74.3% que tiene Chile.
La caída del ingreso derivada del desempleo y de las interrupciones en la actividad económica por la pandemia, ampliaron la brecha de desigualdad en México y empujaron a muchas familias más a la pobreza. De hecho la pobreza en la región aumentó entre 33 y 35 millones de personas, consecuencia de la pandemia. Y México contribuyó con buena parte de este incremento.
Por: María Vallejo
Reportera