Actualmente lograr la diversidad de género en posiciones de liderazgo sigue siendo un reto para las empresas mexicanas. Y, a pesar de que los índices de inclusión han aumentado, apenas el 10.9% de los cargos con poder de decisión son ocupados por mujeres.
“Las organizaciones que logran la diversidad de género en posiciones de liderazgo obtienen un mayor rendimiento financiero. El delta que puede existir entre tener y no tener mujeres en un nivel de dirección puede ser de alrededor de 40% más rentable que una empresa que tiene mujeres en la primera plana que las que no lo tienen” indicó Patricia Barra en el marco del evento Capital Talks by Aon.
Según informes del Banco Mundial para 2025, la paridad de género podría sumar 12 billones de dólares a la economía mundial; es decir, que la inclusión de las mujeres en posiciones con poder de decisión contribuiría no solo al crecimiento de las empresas, sino que estas impulsarían las economías de los países.
“Los beneficios de una cultura de inclusión de género no ha sido suficientemente difundida en términos de impacto que tienen las mujeres en la evolución empresarial. Las mujeres en posición de liderazgo tienden a ser más innovadoras y buscan de manera creativa dar solución a los problemas de la empresa”, dijo Barra.
Asimismo, la experta señaló que la apertura de género trae consigo a las compañías mejor desempeño financiero, mayor rentabilidad, mejores esquemas de responsabilidad social corporativa y mayor diversidad de trabajo filantrópico.
Finalmente, Barra recomendó que las empresas busquen el apoyo de asesores de negocio que le permitan crear planes estratégicos de inclusión y crecimiento de su personal para lograr mejores resultados de negocio.
Por: Alejandra Cervantes
Reportera