De acuerdo con el Foro Económico Mundial, México se ubica en el lugar 70 a nivel internacional de infraestructura.
Al respecto, el Ing. Luis Zárate Rocha, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), dijo que falta mucho trabajo para llegar a los primeros 25 lugares.
De hecho, añadió el experto, el sector de la construcción enfrenta nuevos retos en el sexenio que inicia, y aunque se destinaron 4 billones de pesos para las necesidades de este ámbito, no es suficiente para satisfacer las demandas.
“Es necesario duplicar esta inversión, porque falta mucho para un país que requiere de cierta infraestructura, por lo tanto es fundamental impulsar las reformas, tanto energética como hacendaria”.
Añadió que los meses transcurridos del presente año no han sido un buen momento para el sector. “Hemos decrecido el orden de 1.5”. Sin embargo –enfatizó– las compañías se esfuerzan por mantenerse activas, y están preparadas para el último trimestre del 2013, que es muy intenso en cuanto a licitaciones.
Reforma energética
Zárate mencionó que es fundamental que se escuchen todas las voces, que exista una discusión bajo una visión de un país moderno, enfocado a los sucesos mundiales, donde la inversión privada de otros países como Colombia, Venezuela, Noruega e incluso Brasil, sea bien recibida.
¿Por qué se debe impulsar dicha reforma?
A decir del experto, es por los beneficios que traerá al país y a la industria de la construcción.
Primero, estas inversiones le darían trabajo a empresas afiliadas a la CMIC.
Se impulsará a las micros, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) que formarán parte de los grandes consorcios con equidad, así como a la carrera de ingeniería.
Además, añadió, las Mipymes tendrán la oportunidad de ingresar a las ligas mayores, el país necesita más empresas grandes, y que las pequeñas se hagan medianas.
En segundo término, se encuentra el costo de una energía competitiva ¿Por qué? El Presidente de la CMIC afirmó que los insumos de la construcción como el acero, cemento, vidrio, aluminio y cobre que son necesarios en el uso de la energía, bajarían sus costos.
En tercer lugar, se daría un impulso a las energías sustentables. “En la CMIC creemos que debe ser una reforma verde, que impulse la actividad de energía sustentable, eólica, solar, geotérmica, e hidráulica”.
Se ligaría el gasto con los ingresos de productos por la parte petrolera, para tener excedentes que serían destinado a obras de impacto social, como escuelas, hospitales, carreteras rurales, tratamiento de aguas, entre otros.
Por: Michel Alejandra Olguín Lacunza