Los contratos de construcción son complejos por su propia naturaleza debido a que en su redacción, confluyen aspectos técnicos y legales que establecen los derechos y obligaciones para las partes. Si reflexionamos un poco, acertaremos en que la redacción de dichos contratos obedece en mayor medida a la prevención y control de desviaciones, usando el conocimiento de experiencias pasadas y en menor medida a la introducción de elementos novedosos que permitan concluir la obra en tiempo y costo proyectados. Pues resulta que aún con todas las estipulaciones citadas y tratando de cubrir todas las posibles hipótesis que pudieran surgir durante la ejecución de la obra, se generan controversias entre las partes, derivadas de:
• Aumento o disminución de costo y/o tiempo.
• Suspensión parcial o total de la obra.
• Cancelación parcial o total de la obra por parte del dueño.
• Terminación anticipada por casos fortuitos o fuerza mayor.
• Rescisión del contrato por incumplimiento de cualquiera de las partes contratantes.
• Defectos en la obra y/o vicios ocultos.
Por: Ing. Abel Mata Hernández