En los próximos días en el Senado se discutirá una iniciativa para la igualdad salarial entre mujeres y hombres. La propuesta, que pretende modificar 14 leyes federales, introduce por primera vez el concepto “brecha salarial de género”. También contempla multas a las empresas que no obtengan un certificado de no discriminación.
En promedio, en México las trabajadoras ganan 34% menos que sus compañeros por hacer la misma labor y tener la misma jornada, según el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres). Este problema sucede en todo el mundo, pero el promedio mundial es 23 puntos menos. Y en Europa la brecha es de 16%, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El dictamen ya fue aprobado por las comisiones del Trabajo y Previsión Social, para la Igualdad de Género y de Estudios Legislativos Primera de la Cámara Alta. Ahora le tocará al pleno analizarlo y, en su caso, avalarlo. El documento final incluye las sugerencias presentadas en 10 diferentes iniciativas de casi todos los grupos parlamentarios.
Uno de los puntos de esta propuesta de reforma es que en el artículo 2 de la Ley Federal del Trabajo (LFT) quedé estrictamente prohibido preguntar el historial salarial en cualquier momento del proceso de contratación laboral. También, cuestionar sobre el tiempo en el que permaneció en otros empleos.
Pero si después de la negociación del salario, la trabajadora o el trabajador, sin coacción, dan a conocer cuánto percibía, la empresa puede buscar información para confirmarlo. Esto quedaría asentado en un nuevo artículo de esa ley, el 116 Bis.
De ser aprobada por ambas Cámaras la reforma, la LFT definirá como brecha salarial de género a la disparidad existente entre el salario promedio que reciben hombres y mujeres por trabajo igual o de igual valor, en un mismo centro de trabajo.
Por: María Vallejo
Reportera