
Se trata de resolver a las personas todos los problemas relacionados con vender el inmueble actual y adquirir uno nuevo a través de un proceso ágil.
Ser propietario de un inmueble es un logro importante, pero, ¿qué sucede cuando ese lugar ya no cumple con nuestras necesidades porque se requiere más (o menos) metros cuadrados para habitar, o simplemente buscar un espacio con nuevas amenidades?
La respuesta es simple, se necesita vender la propiedad actual y emprender la búsqueda de un espacio que cumpla con los actuales requerimientos. Sin embargo, el panorama se complica cuando vender una propiedad supone un ir y venir de trámites, esto sin tomar en cuenta el tiempo que se invierte para encontrar un comprador que pague lo justo; así como la falta de capital para que en paralelo se realice la compra.
“Sabemos que los cambios llegan cuando menos lo esperamos. De pronto nos vemos envueltos en diversas situaciones como el cambio de empleo y la necesidad de mudarse a otra zona, la llegada de un nuevo miembro y la búsqueda de otro tipo de espacios o un proceso de sucesión por herencia. Es en ese momento cuando los propietarios no encuentran salida a cómo colocar su propiedad en un corto plazo, sin sacrificar el precio; cómo lidiar con el papeleo y además la falta de liquidez”, explica Eduardo Restrepo, CFO y Co-Fundador de Acasa.
De acuerdo con los registros de la proptech, en México, la venta de un inmueble requiere un promedio de 10 meses, y en ocasiones acortar el tiempo significa estar abierto a ofertas muy por debajo del precio de mercado de una propiedad, además de que los trámites suponen un ir y venir para quienes lo hacen por cuenta propia, o una inversión más en un agente que realice el acompañamiento.
Bajo esta problemática, se trata de resolver a las personas todos los problemas relacionados con vender el inmueble actual y adquirir uno nuevo a través de un proceso ágil.
Algunas actividades que hoy ayudan la venta de un inmueble incluyen una atenta escucha del vendedor y sus necesidades del nuevo hogar. Tras 48 horas de la visita se suele emitir una oferta a través de un avalúo que permite brindar un precio justo; Si el cliente está de acuerdo con la propuesta, se fija una promesa de venta por un período de alrededor de 6 meses.
Este es un modelo pensado para personas de entre 30 a 60 años, con inmuebles propios, ubicados en la CDMX, cuyos costos oscilan entre los 3 y 6 millones de pesos. Para su entrada a este mercado, las transacciones inmobiliarias se harán con departamentos de menos de 30 años de antigüedad, ubicados en algunas de las principales colonias de la ciudad.
Información obtenida en: Acasa
