En las organizaciones ha habido muchos cambios, se han empezado a implementar las estrategias ante la emergencia por el virus de Covid-19. Se asesoraron en diferentes áreas. Dejaron de existir como eran y tuvieron que adaptarse a muchas cosas en muy poco tiempo, enfrentando dificultades, tomando decisiones importantes, arriesgando y tomando nuevas rutas de acción.
Algunas organizaciones siguen recalculando nuevas rutas. Existen muchos logros en este tiempo, sin embargo, a veces es difícil atender el trauma y el estrés de una forma adecuada. Las personas se enfrentan a ciertos fenómenos como:
- Fatiga digital, mucho tiempo frente a los monitores, muchas horas de trabajo, sedentarismo y malos hábitos en general.
- Síndrome de la cabaña el cual consiste en el miedo a salir y también la costumbre adquirida del encierro, evadiendo el desconfinamiento físico, mental y emocional.
- Amalgamiento de la vida personal y profesional, se dificulta integrar un nuevo estilo de vida y encontrar balance en el bienestar y recuperar espacio íntimo o privado.
- Desconexión de la persona con su interior y con el mundo externo, la falta de contacto físico y de comunicación asertiva. Algunos síntomas psico-emocionales que es necesario atender actualmente en las personas son: trastorno de ansiedad y depresión, tristeza, miedo y frustración, la falta de concentración, confusión y pensamientos recurrentes estresantes, poca confianza en el futuro y pérdida de sentido de vida
Otros síntomas físicos: dolores de cabeza, musculares, problemas gastrointestinales, insomnio y cansancio o poca energía. Los líderes han tenido un papel importante para recuperar la confianza y el trabajo en equipo para seguir capitalizando las fortalezas y creciendo juntos, atendiendo los puntos de dolor como áreas de oportunidad. Actualmente ya existe una conciencia ante el duelo pandémico.
Por: Verónica Alcocer Lugo,
Tanatóloga y Coach de
Vida. Comunidad Aleteos