En la era digital, el concepto de marca personal cobra suma importancia para ser percibidos como expertos y crecer en el campo profesional.
La marca personal o Personal Brand, es aquello que en el ámbito laboral nos distingue del otro y nos hace visibles ante el mundo y los clientes. La era digital nos brinda multitud de herramientas y canales, como redes sociales y blogs, para mostrar al mundo nuestro valor como profesionales, pero una marca personal es mucho más.
Para crear y gestionar una marca personal tenemos que verla como si fuera una empresa, siguiendo estos pasos con base en dicha analogía podrás crear una marca personal que haga posicionar a tu empresa en los primeros lugares de popularidad.
- Fijar el propósito: hay que definir los objetivos, tener claro cuál es la meta que queremos alcanzar.
- ¿Qué ofrezco? Tenemos que conocernos bien, nuestras cualidades, habilidades, identificar qué nos hace valiosos para los demás, algo así como comprender cuál es nuestro producto que nos hace útil.
- Identificar a nuestro público: para desarrollar una estrategia de posicionamiento personal hay que tener en cuenta a quienes nos rodean, es el equivalente a ‘nuestro mercado’ (nuestra audiencia, competidores, etc.).
- Posicionarse: es una fase clave, debemos identificar los atributos que nos diferencian, que nos distinguen del resto y nos hacen dejar huella.
- Darse a conocer:llega el momento de comunicarlo a los demás. Tenemos que crear los mensajes adecuados para llegar a nuestro mercado y elegir los canales de comunicación a través de los cuales nos vamos a promocionar, desde el networking hasta las redes sociales, desde hablar en público hasta escribir artículos.
- Trabajar el ‘envase’: por último, falta pulir cómo nos presentamos, nuestra imagen. Aquí se incluye desde la imagen personal, el CV, los perfiles de redes sociales o una tarjeta de visita. La imagen forma parte de nuestra marca.
La marca personal es la ‘huella’ que dejamos en nuestro entorno, por lo tanto, los canales online y offline no son más que altavoces. Ese impacto o huella se deja en cada interacción, real o virtual.
Por: Karen Valencia
Reportera