“Una nueva forma de gestión empresarial y de hacer negocios”.
La responsabilidad social empresarial (RSE) llegó para quedarse y aunque son pocas las empresas que la asumen como directriz en su gestión de negocios, cada vez surge mayor evidencia del impacto que tiene sumarse a esta tendencia en auge. Así es la opinión coincidente de quienes atienden el tema en diferentes trincheras desde hace algunos años. Consultoría, iniciativa privada, sociedad civil y organismos internacionales destacan el valor que tiene la RSE, mediante estudios e investigaciones. Definida como “una nueva forma de gestión empresarial y de hacer negocios”, por el Centro Mexicano para la Filantropía (CEMEFI), la RSE implica atender aspectos no sólo económicos sino también sociales y ambientales. “La RSE es una visión de negocios que integra el respeto por las personas, los valores éticos, la comunidad y el medio ambiente con la gestión misma de la empresa (…) reconociendo los intereses de los distintos grupos con los que se relaciona y buscando la preservación del medio ambiente y la sustentabilidad de las generaciones futuras”, esta información se lee en el portal de internet de dicho organismo, promotor de la RSE.
Alcance en crecimiento
El interés que ha despertado la responsabilidad social empresarial en México es muy reciente, y eso significa una enorme área de oportunidad para el ámbito empresarial, así lo considera Klaus Gérman Phinder, director general de la consultoría especializada en responsabilidad social y desarrollo sustentable Promotora ACCSE. Esta reciente visibilidad de la responsabilidad social no es exclusiva de México, explica. A nivel internacional, la responsabilidad social cobró nombre y forma en 2000, un año después del llamado que hiciera Kofi Annan, entonces secretario general de Naciones Unidas, a que las empresas se comprometieran con una serie de principios universalmente aceptados para hacer frente a los retos globales.
Por: Alejandra Aguilar Si desea conocer el texto completo busque nuestra edición de Mayo en todos los Sanborns del país.