En el sexenio pasado el Gobierno Federal destinó aproximadamente 237 mil 044.8 millones de pesos al sector hidráulico. Monto que representó un crecimiento de casi el doble (91.3%) con respecto a la inversión en la administración antepasada que fue de 123 mil 915.6 millones.
No obstante, el país aún cuenta con diversas necesidades en cuanto el abastecimiento del vital líquido. Así, la construcción de infraestructura beneficia a los mexicanos porque genera empleo y crecimiento financiero, además aumenta la productividad en la economía nacional.
Por ello, es un elemento esencial para el bienestar de la población, y crear proyectos en este rubro es una gran oportunidad para todos los empresarios dedicados a dicho sector.
De acuerdo con información otorgada por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), México es un país dividido hidrográficamente. Prácticamente el norte y una porción del centro es semiárida, y la porción sur-sureste es húmeda.
La parte central norte, abarca aproximadamente el 70% del territorio, además es donde se genera la mayor parte del Producto Interno Bruto (PIB). Así, esta área se encuentra en términos hidráulicos en un estrés hídrico, derivado de la propia naturaleza y demanda de agua.
Situación mexicana
Según la misma Conagua, durante el período de 2007-2012 se incorporaron aproximadamente 14.4 millones de personas a los servicios de agua potable y 16.3 millones de personas al servicio de alcantarillado.
En 2011 entraron en operación 103 plantas de tratamiento de aguas residuales con una capacidad instalada de 137,082.1 litros por segundo (lps), que incrementó en 4,040.2 Ips el caudal de este líquido.
Al cierre de 2011, la infraestructura de tratamiento ascendió a dos mil 289 plantas con caudal tratado total de 97 mil 640.2 lps, que permitió alcanzar una cobertura nacional de tratamiento de 46.5%.
A junio de 2012, se encontraban en proceso 43 plantas de tratamiento, que en conjunto cuentan con una capacidad instalada de 19 mil 976 lps, con dicha infraestructura se tratará en caudal de aguas residuales de 17 mil 985 lps.
Obras destacadas
Con una inversión de 19,500 mdp, se trabajó en el Túnel Emisor Oriente (TEO), que cuenta con 7 metros de diámetro y 62 km de longitud. Esta obra tiene una capacidad de desalojo de 150 m3/s, y cuenta con 25 lumbreras.
La planta de Bombeo el Caracol es otro proyecto destacable del sexenio, ya que con una inversión de 208.5 mdp tiene una capacidad de 40 m3/s para bombear el agua en el tramo 1 del TEO.
Además, mantiene un caudal base de 8 m3/s para abastecer las zonas de riego de los estados de México e Hidalgo a lo largo del Gran Canal.
La planta de tratamiento de aguas residuales de Atotonilco contó con una inversión de 10 mil 137 mdp. Esta obra es fundamental porque saneará el 60% de las aguas residuales generadas en el Valle de México.
Su capacidad de tratamiento es de 23 m3/s en época seca y 12 m3/s adicionales en temporada de lluvias. Además, puede regar a más de 80 mil ha. en el Valle del Mezquital, Alfayucan y Tula.
Por: Michel Alejandra Olguín Lacunza.
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